* Triste realidad para la escuadra samaria, que volvió a caer, está vez en suelo antioqueño.
RIONEGRO
Unión Magdalena en cada jornada parece estar ‘cavando su propia tumba’. Después de la estrepitosa caída en Barranquilla (7-1), se pensaba que ante Águilas iba a dar el máximo por resarcirse y conseguir un buen resultado, pero al final no fue así.
Frente a los antioqueños, Unión sucumbió, dejando en evidencia su frívola intención de hacerse sólido en defensa, y por el contrario, permitió con sus errores, que el delantero Marco Pérez se erigiera como figura al marcar los dos goles con los que levantó la tribuna en el estadio Alberto Grisales de Rionegro.
El descuento para los bananeros llegó sobre el final de la contienda, en una acción de buen corte colectivo y que capitaliza Fabián Cantillo, con la complicidad de un zaguero dorado.
Con la derrota, Unión Magdalena no le queda otra que ganar seis de los nueve juegos que le restan a la fase todos contra todos y orar para que Huila, Envigado y Jaguares pierdan el mayor número de encuentro para así tener opción de instalarse de 18, algo que resulta demasiado complicado.
