* El cuadro ‘tiburón’ igualó por segunda vez como local (1-1) y deberá buscar la clasificación en la altura de Quito y Lima.
BARRANQUILLA
Ese momento fulgurante que tuvo Junior cuando inició su camino en la Copa Libertadores 2024, con una victoria contundente sobre Botafogo en Brasil, parece desmoronarse, tras la floja respuesta que ha tenido en sus dos partidos de local ante Universitario del Perú, y el de este martes ante Liga de Quito (ambos empates).
Un 1-1 muy generoso sí se entra a valorar la lluvia de situaciones de riesgo que existieron frente a los arqueros Santiago Mele por Junior y Alexander Domínguez por la Liga. La etapa inicial con un visitante criterioso, que vio como Carlos Bacca le bajaba su enorme ritmo con una pena máxima convertida sobre el minuto 12.
El gran protagonismo de Mele se hizo evidente tras las incursiones de los ecuatorianos; que al final lograron la igualdad sobre el minuto 45 con una pena máxima que ‘besó’ la red, con un certero remate del paraguayo Alex Arce.
Para el complemento de las acciones llegó lo inesperado: un verdadero ‘festival del desperdicio’ por parte del onceno tiburón. La poca contundencia fue la constante durante el tiempo reglamentario, con opciones dilapidadas por José Enamorado, Gabriel Fuentes y ni que hablar de la pena máxima que desperdició Luis ‘Cariaco’ González.
El aliento del público estuvo siempre presente, sin embargo, con los desaciertos de los jugadores ‘ñeros’ llegó la molestia y hasta las rechiflas debido a la manera como el local no pudo liquidar las acciones, ante un jerárquico onceno ecuatoriano.
Tras ese flojo resultado, al equipo del samario Arturo Reyes le toca pelear la clasificación de visitante en dos plazas difíciles como Lima y Quito, ambas con el fantasma de la altura.
